"Hay un ambiente de trabajo realmente positivo. Me siento como en casa aquí"

Antes de unirme a Kramp, había trabajado en el desarrollo de web durante unos 15 años. Los primeros once años fueron con una agencia digital, trabajando para todo tipo de clientes multinacionales, y terminé como consultor técnico y desarrollador senior front-end. Entonces decidí que quería un cambio de entorno, y trabajé para una serie de start-ups en el área de Ámsterdam. Me encantaba esa escena de las start-ups, pero la estabilidad financiera era un problema y ¡varias empresas cerraron! Mi esposa y yo decidimos aprovechar la oportunidad de mudarnos al este del país, llevábamos varios años hablando de ello. Así que nos mudamos a 150 km al este y empecé a buscar un nuevo trabajo. Me registré en algunas empresas de selección y en una semana tuve seis entrevistas aquí en el este, lo que me sorprendió, ya que piensas que todo el trabajo técnico está en el oeste.


Kramp fue una de esas entrevistas. Por supuesto, después de trabajar para empresas incipientes inestables, el tamaño y la estabilidad de Kramp me atrajo mucho. Pero también podía ofrecerme un camino profesional. Me gusta mucho la idea de comprometerme con una empresa, y poder decir "esta es mi empresa". Al final, tuve que elegir entre dos ofertas: un papel de consultor para otra compañía, y la oferta de Kramp.


Fueron mis colegas actuales los que realmente me ayudaron a tomar mi decisión. Pasé un día con el equipo de aquí antes de aceptar el trabajo. Era un ambiente cálido y amistoso, y el equipo hizo todo lo posible para convencerme de trabajar aquí, y realmente dice mucho sobre Kramp el que la gente que trabaja aquí realmente trate de persuadirte para que te unas!


Tengo que decir que llevo aquí un año y las promesas que se hicieron se hicieron realidad. Es un verdadero ambiente familiar, es una gran empresa para trabajar, y hay oportunidades para crecer. Tengo la libertad de dar forma a mi propio puesto, hasta cierto punto. La comunicación es uno de mis puntos fuertes, y me gusta la colaboración e interacción con otros departamentos; me gusta hacer conexiones.


El trabajo en sí siempre es desafiante e interesante. Estamos actualizando la vieja tienda virtual para toda Europa, en transición país por país. Es un verdadero reto tecnológico en el que estamos trabajando con las últimas tecnologías, y hay un alto nivel de experiencia dentro del equipo, mucha gente inteligente. Parte de la tecnología era nueva para mí, pero tuve la oportunidad de aprender junto a gente muy capacitada. Estamos basados en Varsseveld, pero también trabajamos con el Kramp Hub en Utrecht, donde hay alrededor de 40 o 50 personas trabajando en desarrollos emocionantes. Colaboramos mucho, normalmente trabajamos allí dos de cada cinco días. Incluso mi equipo de primera línea está dividido entre las dos ubicaciones, lo que es realmente dinámico, y hay un enfoque positivo para compartir el conocimiento. ¡Me gusta mucho!


Aquí están pasando tantas cosas, y tantos equipos trabajando en IT. Un paisaje tan grande de servicios, tantas cosas pasando entre bastidores. Lo hace realmente desafiante y divertido. Hay variedad en lo que hago: un día me sumerjo en el código, al siguiente estoy con mis colegas discutiendo sobre la funcionalidad y la estrategia. Un año después, siento que puedo hacer una gran contribución.


Y Kramp te da un buen equilibrio entre trabajo y vida. Hay mucha presión en muchas compañías para quedarte trabajando después de las horas normales. Aquí, Kramp realmente tiene en cuenta que tu vida privada importa, que necesitas ese espacio. La gente trabaja duro, está motivada y asume responsabilidades, pero se les anima a conseguir el equilibrio adecuado. Crea una atmósfera de trabajo realmente positiva. Me siento como en casa aquí.